El sistema educativo en India, ante el reto de transformarse completamente

12/08/2020

India ha ido registrando un número progresivamente creciente de contagios del coronavirus desde que comenzó la pandemia, llegando a registrar hasta 10.000 casos nuevos diariamente en mayo. Unos 20 millones de trabajadores migrantes indios de barrios marginales urbanos con altas tasas de infección viajaron a sus hogares, y así es como la enfermedad se propagó por todo el país. Hoy, es el cuarto país más afectado del mundo. Los expertos en salud dicen que la situación del virus sigue siendo impredecible y que la India tendrá que encontrar sistemas para vivir con el.

La educación en India se ha convertido en un desafío. El gobierno decidió no abrir las escuelas mientras el país lucha por combatir la pandemia, y millones de niños se han visto afectados. Ahora, muchos padres están en contra de la reapertura de las escuelas, pidiendo esperar hasta que no haya contagios o se encuentre una vacuna.

La educación online no puede ser una solución para todo el país, debido a la brecha tecnológica: las señales de Internet no llegan a áreas remotas como las aldeas montañosas, e incluso en los centros urbanos la conectividad es deficiente. Por eso, es necesario encontrar una manera de llegar a los pobres y los estudiantes de las aldeas.

Una fotografía de una adolescente sentada en el techo de su casa de azulejos con un teléfono móvil se hizo viral en el estado de Kerala, en el sur de India, y muestra la lucha de los estudiantes para asistir a clases online cuando las señales de Internet son débiles: se prueba en todos los lugares de casa, incluidas las terrazas y los techos.

La situación de los estudiantes pobres es imaginable. Existe una necesidad urgente de investigación e innovación para encontrar un sistema más efectivo, considerando las limitaciones de la educación tradicional. El mayor desafío educacional  es proveer oportunidades de aprendizaje integral, relevantes y significativas para todos los niños y niñas, con independencia de su origen ocondición social. Nunca cobró más sentido la idea de proveer a todos de “una educación para la vida”.

El cierre de escuelas da lugar a una brecha de género grande en la educación. "Meses de arduo trabajo para convencer a los ancianos de las aldeas y a los padres de que envíen a sus niñas a la escuela pueden desperdiciarse si un shock económico las empuja a la pobreza extrema", dice Safena Husáin, fundadora de EducateGirls).

La Iglesia Católica tiene la red más grande de escuelas en India después del gobierno. Dirige y administra 54.934 instituciones educativas con el máximo compromiso y seriedad, lo que genera aprecio y gran reconocimiento por parte de la sociedad.

Cuanto más tiempo estén los niños fuera de la escuela, es más probable que no regresen, especialmente cuando provienen de hogares con bajos ingresos o cuando son niñas. Hay que asegurar que no se produzca una exclusión con los niños pobres, las niñas o las personas con discapacidad.

Fundación Juan Bonal y las Hermanas de la Caridad de Santa Ana mantienen numerosos centros en India que cuidan de la educación de los más jóvenes. Ahora es momento de proteger a los niños y niñas más vulnerables, que serán los más afectados por esta crisis sanitaria global.

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