Carta de la Hermana Victoria, desde Bangalore (India).
01/02/2016
Querido amigo:
Saludos de bien y paz desde Bangalore, en la India.
¿Cómo esta usted? Espero todo le vaya bien. Aquí estamos bien, a Dios gracias.
¿Qué hacemos en los barrios? Atendemos a niños que quedan en la calle desatendidos, al ir sus madres a trabajar como house maides (empleadas de hogar). Nosotras cuidamos de estos niños mientras las madres intentan ganar algo para el mantenimiento de la familia. Con nosotras el niño está bien cuidado, alimentado y aprendiendo. No vagando por las calles.
Los niños del curso 2015/2016 son 90 en total, su edad está entre dos y cuatro años. Son de los barrios de Jeevanahalli, Bypanahalli y Domdiguta. Las hermanas visitan cada sábado estos barrios y dedican su tiempo y creatividad con estos niños. A la vez, atienden las necesidades de las familias en estado más extremo de necesidad.
Les enseñamos a los niños el alfabeto inglés, hindi, tamil, y kannada (idioma local); números, colores, nombres de frutas y verduras... y también a bailar, cantar y escribir. Los niños están divididos en dos grupos. Son atendidos por dos hermanas, dos ayudantes y una cocinera, que trabajan de 8,30am a 4pm.
A las 10am, les damos una vaso leche, un huevo y galletas. Al mediodía, comen arroz con verduras, dhal (lentejas rojas) y, antes de irse por la tarde, un vaso leche con galletas.
En Navidad, les regalamos un bolso para venir al colegio, una manta y jersey. Aquí, en diciembre y enero, las temperaturas son más bajas. También les damos uniformes (dos set para cada uno), libros... Les facilitamos todo lo necesario para su aprendizaje. Como fin de curso, les damos también un regalo. Todo esto en un ambiente de fiesta, teatro, cantos... Intentamos estimularlos y hacer que compartan actividades entre ellos.
Una vez terminan la guardería, los colocamos en colegios para proseguir sus estudios. Algunos no tienen padres, no encuentran sitio para estudiar. Muchos son emigrantes de otras provincias. Si necesitan dinero para su escolarización, nosotras hacemos frente al coste, haciendo posible en muchos casos que su estudio pueda continuar. Diariamente, de 5 pm a 7 pm, 2 hermanas les dan clases de refuerzo para facilitar su comprensión y aprendizaje en la nueva etapa.
Dos o tres veces al año, hacemos revisiones médicas y distribuimos medicinas en los casos necesarios. Esto muy importante también para los ancianos. Se dan charlas médicas de higiene a los padres.
Los 365 días del año, damos comida a 45 ancianos del barrio. Como están casi en la calle, la comida caliente les viene bien. Algunos dicen que lo que les damos les sirve para comida y cena.
Los sábados, cuando visitamos los barrios, atendemos necesidades y compartimos con ellos su vida.
No puedo decir concretamente "esto" y "eso" hacemos: una madre no puede decir hago "esto" por el niño, porque la necesidad empuja a hacer lo que se puede o se necesita en el momento, ante cada problema. Esto es lo fijo, luego siempre hay casos especiales que se atienden según la necesidad de la familia y del niño o anciano.
Gracias por su generosidad, se lo agradecemos mucho. Le recordamos en nuestras oraciones diaria y que Dios le bendiga.
Gracias por todo, y por estar apoyando.
Con mis mejores saludos, en misión de oración.
Hermana Victoria