La Gala Anual de Zaragoza mostró el carácter universal de Fundación Juan Bonal.
17/11/2015
El pasado 28 de Octubre tuvo lugar la Gala Anual de Zaragoza, que dio comienzo a una semana solidaria en la que se abrió al público el trabajo de Fundación Juan Bonal sobre la infancia en Cuba y el Mercadillo Solidario, que ha estado recibiendo visitantes hasta el día 7.
La Gala Anual tuvo lugar en el Patio de la Infanta de la capital aragonesa, un lugar emblemático en el que fue posible la celebración gracias a la inestimable colaboración de Ibercaja.
De la mano de la periodista Pilar Estopiñá, desfilaron por el escenario artistas y ponentes de la Fundación. Entre todos, lograron construir una tarde llena de reflexión y emoción.
Pilar no quiso dejar de repetir la experiencia del año pasado, y condujo el evento con elegancia y profesionalidad. Sus palabras fueron dando paso a cada uno de los participantes con fluidez, en un acto algo más corto que otros años, cargado de contenido.
Miguel Egido, Director de Comunicación, habló de la persona como motivo y justificación de la existencia de Fundación Juan Bonal, haciendo un recorrido por los diferentes lugares del mundo en los que las Hermanas de la Caridad de Santa Ana están ejerciendo su importante labor. Además, hizo referencia a algunos de los proyectos que actualmente se están desarrollando.
Luis López, Director de Marketing, presentó un reportaje que mostró la realidad del pueblo de Cuba y las necesidades de su infancia, planteando muchas preguntas para el futuro del país, tras el momento de cambio que parece estar viviendo.
Raquel Mayayo, Directora de la Fundación, agradeció a todos los padrinos y colaboradores su ayuda a los más necesitados y su sensibilidad altruista.
Junto a todos ellos, la cantante Olga Álvarez ofreció su voz para llenar el escenario con las canciones "Mi tierra", de Gloria Estefan, y "Sólo le pido a Dios", de Ana Belén.
El broche de oro llegó con la actuación de la Hermana Alphy, venida de la India, quien interpretó un baile tradicional cuyo significado de agradecimiento a Dios por ofrecernos su amor se dirigió también a agradecer a todos los que colaboraron en la ayuda al pueblo de Nepal tras los terremotos. La Hermana Alphy llenó la sala de luz, color y música, hipnotizando a un público que se deshizo en el aplauso final.
El evento dejó un gran sabor de boca al equipo de la Fundación y a todos los voluntarios que participaron, a los que Fundación Juan Bonal quiere agradecer toda su colaboración.