Durante la celebración de la Semana Santa, recordamos que el valor del sacrificio por el prójimo es ilimitado. Gracias a nuestro esfuerzo por los demás, así como otros se han esforzado por nosotros en el pasado, logramos construir un mundo mejor y más justo.

 

El valor de la vivencia coherente y comprometida de lo que estos días representan para las Hermanas de la Caridad de Santa Ana y de Fundación Juan Bonal reside en hacer propio el deseo de dedicar nuestro tiempo, esfuerzo, recursos y atención a las personas, especialmente a quienes más lo necesitan. Su situación desfavorecida y en principio condenada, puede cambiar y llenarse de esperanza cuando quien tiene posibilidad de ayudar da cabida a la solidaridad y tiende la mano.

 

Fundación Juan Bonal desea a todos los padrinos, madrinas, colaboradores y amigos una Semana Santa profunda, valiosa y llena de significado. La Fundación se compromete, una vez más, con el objetivo permanente de trabajar para las personas y crear cauces en los que pueda fluir la esperanza en el futuro para todos. Cada día, especialmente tras la experiencia de la Semana Santa, algo cambia y refuerza aún más la motivación de la Fundación para hacer junto a todos un mundo más justo y solidario.