Informe Save the Children I: niños y niñas en riesgo de pobreza o exclusión social.

28/04/2014

El informe avisa de los preocupantes datos que arrojan las conclusiones del estudio realizado. Los últimos datos arrancan de 2012. Casi 27 millones de niños y niñas en riesgo de pobreza o exclusión social: el 28% del total de la población menor de 18 años. El 20,8 % de los niños y las niñas, en hogares con ingresos disponibles por debajo del 60% de la mediana nacional. El 9%, en hogares con muy baja intensidad laboral. Y el 11,8%, en hogares con privaciones materiales.

La situación de paro actual afecta directamente a las familias y, en especial, a los niños. El informe especifica que los niños y niñas cuyos padres tienen una muy baja intensidad laboral tienen el 56,7% más de probabilidades de estar en riesgo de pobreza o exclusión social que aquellos cuyos padres tienen una alta intensidad. Es decir, las cifras de paro que vemos en las noticias se traducen directamente en la reducción de oportunidades de futuro para adultos y, sobre todo, para los niños.
La realidad es que, si miramos directamente a España, el documento muestra un dato estremecedor. El 33,8% de los niños y niñas viven en riesgo de pobreza o exclusión social, y el 29,9% de los niños y niñas viven bajo el umbral de pobreza relativa.
El testimonio de un niño de 8 años revela en el informe que “Antes solía ir al cine con papá y mamá. Tenía libros, iba a las excursiones del colegio y ellos podían pagar la hipoteca. Ahora no podemos hacer nada de eso.”

Fundación Juan Bonal comparte la visión de trascendencia de Manos Unidas sobre la infancia. No sólo son el futuro, son la parte más vulnerable de la sociedad. Reciben el impacto de lo que ocurre sin posibilidad de defensa propia. A nivel global, sólo entidades como éstas levantan las manos para cuidar de ellos.
La acción de Fundación Juan Bonal y las Hermanas de la Caridad de Santa Ana siempre ha tenido un objetivo claro de lucha por la dignidad de la persona y por la protección de los más desfavorecidos. A menudo, éstos son los niños. En los centros que gestiona la Fundación, y en los proyectos que se llevan a cabo (tanto en Europa como fuera de ella), la importancia que se otorga a la infancia es primordial.
Los objetivos son la integración social del niño, su protección  física, la cobertura de sus necesidades básicas y de afecto, la construcción de su autoestima y la posibilitación de oportunidades de futura para su vida adulta.
A través de apadrinamientos, becas de estudios y otras líneas de trabajo se han cubierto ya las necesidades de un gran número de niños. El trabajo continúa para atender a todas las nuevas demandas y situaciones que surgen, con la vista puesta en devolverles su infancia.