Una lucha diaria contra el hambre y la malnutrición
09/06/2023
Las Hermanas de la Caridad de Santa Ana trabajan diariamente con total entrega para cubrir las necesidades básicas de los más vulnerables y desatendidos. En especial, se preocupan por los niños de entornos pobres, y prestan una gran atención a su correcta nutrición.
Los centros nutricionales que impulsan las Hermanas en todo el mundo son bastiones que cada jornada plantan cara al hambre. Realizan una apuesta clara por alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por Naciones Unidas, en especial los números 1 (fin de la pobreza), 2 (hambre cero) y 3 (salud y bienestar).
En países como Costa de Marfil o Ruanda, las misiones de las Hermanas se localizan en torno a comunidades y pueblos muy desfavorecidos, que no tienen recursos suficientes para mantenerse con dignidad. La lucha por obtener un alimento suficiente es ardua, día a día.
La dificultad es enorme: un bote de leche cuesta 7€; para un recién nacido, los biberones de un día cuestan 2€ (aunque a los 3 meses costarán casi 4€, y a los 5 meses costarán 5€). Hay que empezar con las papillas. Y el salario diario de un obrero no llega a los 5€.
Éste es Fuognigue. Su madre tiene una enfermedad mental. Es la abuela quien se ocupa del niño, que sufre malnutrición cronica. Las Hermanas le ofrecen alimentos, lo atienden y le facilitan comida para una semana. Es uno de tantos ejemplos en los que descubrimos cómo el trabajo de las Hermanas en los centros nutricionales salva vidas y devuelve la dignidad al ser humano.
Puedes verlo en este vídeo:
https://www.youtube.com/shorts/Ng0qmB4RArA
Fundación Juan Bonal es expresión de solidaridad.
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