Restaurar los ecosistemas para acabar con la pobreza
25/04/2022
El 22 de abril se conmemora el Día Internacional de la Madre Tierra. Este año es el primero que se celebra dentro del Decenio de la ONU para la Restauración de Ecosistemas. El objetivo es particularmente importante puesto que, además de reconciliarnos con nuestro planeta y restaurar su biodiversidad y su salud, esto tiene importantes repercusiones sobre el ser humano, que afectan directamente a sus necesidades básicas.
En primer lugar, los ecosistemas sustentan la vida en la Tierra y de su salud depende la salud de los seres humanos. En segundo lugar, restaurar los ecosistemas dañados será vital para acabar con la pobreza, una lacra que menoscaba la dignidad de muchas personas en todo el mundo y que imposibilita que puedan desarrollarse de forma íntegra y completa. En tercer lugar, devolver la salud a los ecosistemas nos ayudará a combatir el cambio climático, lo que puede suponer evitar muertes de forma masiva.
Este Día Internacional de la Madre Tierra nos recuerda que necesitamos promover una economía más sostenible, en armonía con la naturaleza. Para lograrlo, todos debemos colaborar: se trata de un reto para todos, y en el que todos somos parte de la solución.
Fundación Juan Bonal trabaja día a día por los más desfavorecidos, con el claro objetivo de defender la dignidad del ser humano. En esa lucha, tiene muy claro que la pobreza y el cambio climático son dos factores que inciden directamente en la generación de desigualdades y vulnerabilidad para muchas personas que se encuentran en situaciones difíciles, con pocas oportunidades de actuar o defenderse ante ambas amenazas. El cuidado de nuestro planeta y una acción social que incluya la defensa de la ecología en su actuación se convierten en piezas clave de un futuro en el que ninguna persona se vea afectada por el drama de la pobreza o por las devastadoras consecuencias del cambio climático.
Las Hermanas de la Caridad de Santa Ana tienden la mano en sus misiones a los más pobres, y se esfuerzan por contrarrestar los efectos de la pobreza. Además, los proyectos de Fundación Juan Bonal actúan ante emergencias humanitarias y los desastres de un clima enfermo que causa muertes y destrucción. Ante todo ello, las manos de Juan Bonal actúan por diversos medios, restaurando equilibrios y cubriendo necesidades básicas, devolviendo la sonrisa a las víctimas de un mundo desigual. Queda mucho por hacer, pero cada jornada es una aportación más para lograr alcanzar ese futuro sin pobreza y en el que la Madre Tierra goce de plena salud y pueda seguir cuidando de todos nosotros.
Fundación Juan Bonal es expresión de solidaridad.
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